El precio de la luz en el mercado mayorista fue de cero euros desde las 12 del mediodía hasta las seis de la tarde del domingo 27 de marzo de 2023. Aunque no es la primera vez que sucede, se trata de una situación particular, que se debe a que las energías renovables más baratas, como la eólica o la fotovoltaica, son capaces de cubrir toda la demanda de electricidad de la población.
Sin embargo, que la luz se pague a cero euros en el mercado eléctrico no implica que el consumidor pague cero euros en su factura. Existen otros costes, como los cargos y los peajes por utilizar la red eléctrica, que se suman a la tarifa de la electricidad.
Las renovables y la caída de la demanda hacen caer el precio
Desde las 12 de la mañana hasta las seis de la tarde de este domingo, ambas incluidas, el precio marginal de la electricidad en España se ha mantenido en cero euros el megavatio hora (MWh), según el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE).
Como explica a Newtral.es Mario Sánchez-Herrero, profesor de Economía de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), la electricidad en el mercado mayorista se vendió a cero euros en esas horas porque “toda la demanda se cubrió con tecnologías que son precio aceptantes”. Es decir, que se conforman “con el precio que determina el mercado”, ya que la energía que generan se pierde si no se vende. Es el caso de la eólica, la fotovoltaica o la nuclear.
Por esa razón, en un mercado en el que el precio se establece según la curva de oferta-demanda, donde la última energía que entra para cubrir la demanda necesaria es la que determina el precio, la ofrecen a cero euros para asegurarse de que venden la energía que producen.
Normalmente la última tecnología que entra es otra a precio más elevado, como la hidráulica o la generación eléctrica con gas en centrales de ciclo combinado, y las precio aceptantes obtienen los llamados ‘beneficios caídos del cielo’. Sin embargo, cuando la demanda baja o la producción renovable crece, las tecnologías más baratas son capaces de cubrir toda la electricidad requerida por la población. “Esto es muy típico de los fines de semana, en los que la demanda cae, y, si hay una confluencia climática favorable, en la que hace viento y hace sol, esto es lo que acaba sucediendo”, justifica el docente.
La factura de la luz no equivale a cero, pese al precio en el mercado mayorista
Aun así, que la electricidad se venda a coste cero en el mercado mayorista no implica que ese sea el precio de la factura de la luz. De forma adicional al importe de la energía, el precio para el consumidor final depende de otros factores. “El precio minorista incluye dos componentes de coste, que son los cargos y los peajes”, resume Sánchez-Herrero.
Por un lado, los peajes son los gastos relacionados con el uso de la red de transporte y distribución de la electricidad, como se recoge en la página web de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Mientras, los cargos se refieren a los costes del sistema más allá de la red e incluyen la financiación de las renovables o el sobrecoste de producción de energía en los territorios no peninsulares.
De la misma forma, dentro del propio precio de la luz en la factura, se encuentran dos variables, según Diego Rodríguez, catedrático de Economía de la Universidad Complutense de Madrid (UCM): el término de la potencia y el de la energía. “El término de la potencia tiene que ver con la potencia contratada y, consumas o no consumas, tienes un pago en tu factura mensual”, destaca. Finalmente, los impuestos se aplicarían sobre el resultado de la suma de los elementos mencionados.
Pese a ello, el precio cero de la electricidad solo afecta a los consumidores del mercado regulado, cuyo importe se ve influenciado directamente por el precio mayorista, pero no a los del mercado libre, que se basa en los acuerdos bilaterales entre clientes y comercializadoras. Para los primeros, aunque el coste no sea cero, “es óptimo poner la lavadora a las tres de la tarde”, ejemplifica Rodríguez, ya que más tarde el precio volvió a subir.
El precio cero de la luz, una situación que se repetirá cada vez más
De acuerdo con los expertos consultados, esta situación, hasta ahora puntual, será cada vez “menos excepcional”, como dice Sánchez-Herrero. “Está habiendo un despliegue muy rápido de nueva potencia renovable (...) y, sin embargo, la demanda de electricidad no está creciendo a la misma velocidad”, expone.
Este escenario se asocia al concepto de “canibalización de precios”, según cita Rodríguez, en la que las renovables entran al mix eléctrico buscando beneficios al ver un precio alto causado por el gas, pero ‘se comen’ el espacio del gas y reducen el precio de la energía. “Que todo el mundo entre hace que el precio tienda a irse a cero”, desarrolla el también investigador asociado de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea).
Aunque el precio cero de la luz parece algo positivo para el consumidor a primera vista, desincentiva la inversión en energías renovables. Como solución, Rodríguez plantea potenciar el almacenamiento, en especial a través de las centrales hidráulicas de bombeo. “Eso es lo que permitirá gestionar toda esa energía que te sobra en un momento dado y también hacer que el precio no se desplome tanto, además de permitir que en el momento en el que no tengas energías renovables el precio no se vaya tan arriba”, sentencia.
Fuentes
Precio horario del mercado diario de la electricidad según el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE)
Mario Sánchez-Herrero, profesor de Economía de la Universidad Complutense de Madrid (UCM)
Datos de la factura de la luz en la página web de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC)
Diego Rodríguez, catedrático de Economía de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) e investigador asociado de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea)
