Cuidado con la teoría de la conspiración que asegura que la DANA en la provincia de Valencia fue provocada por el radar en Morón de la Frontera (Sevilla)

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“La DANA en Valencia no es un fenómeno natural y fue provocado por un radar en Morón de la Frontera”. Circulan contenidos que afirman que estos detectores metereológicos “desplazan y deshacen nubes con impulsos electromagnéticos”, y que el ubicado en Morón de la Frontera (Sevilla) fue el causante de desviar las precipitaciones a Valencia el pasado martes 29 de octubre. Pero es una teoría de la conspiración: los radares meteorológicos sirven para localizar tormentas y seguir su evolución, pero no pueden desviarlas.

Cómo defiende el vídeo que la DANA fue provocada por el radar en Morón de la Frontera

El pasado martes 29 de octubre varias zonas de la Comunidad Valenciana y Albacete se vieron afectadas por una DANA. Desde entonces han surgido bulos y desinformaciones en redes sociales, como esta teoría de la conspiración que afirma que el radar de Morón de la Frontera (en Sevilla) provocó las fuertes lluvias que -afirma- “no son naturales”. El autor del vídeo asegura haber trabajado para la Agencia de Meteorología Francesa y, según asegura, que lo que ocurrió en Valencia “no cuadra con ningún fenómeno climático natural”.

Sostiene, sin aportar pruebas, que los radares meteorológicos son capaces de “desplazar y deshacer nubes con impulsos electromagnéticos”. Así, el radar de Morón de la Frontera habría desplazado las precipitaciones hasta la provincia de Valencia, “pese a tener el viento totalmente en contra”. En este punto, aporta mapas como supuesta “prueba” para mostrar la dirección del viento pero no tiene fecha o es indistinguible.

Capturas de pantalla de los mapas que se muestran en el vídeo. Fuente: Twitter (ahora X).

La única forma de detener esto, en palabras del protagonista del vídeo, es tener otro radar en la dirección que se desplazaban las nubes: Murcia o Alicante. Según defienden estos contenidos, ambos estaban inhabilitados desde tres días antes de la catástrofe por una avería.

También asegura que se trata de una inundación sin precedentes producida en “el año que más presas hemos derruido para cumplir con los objetivos” de la Agenda 2030.

Los radares metereológicos sirven para localizar tormentas y seguir su evolución, pero no son capaces de desplazarlas

Benito Fuentes, meteorólogo y divulgador, explica a Maldita.es que un radar meteorológico funciona emitiendo pulsos electromagnéticos con una longitud de onda determinada que es capaz de detectar gotas de agua, nieve o granizo. Como explica AEMET en su cuenta oficial de Twitter (ahora X) destinada a la divulgación, cuando una de estas ondas electromagnéticas interacciona con algún hidrometeoro (lluvia, granizo, nieve) se produce un cambio en la frecuencia y esto lo mide el radar al detectar de nuevo la onda. Es una especie de efecto rebote, según aclara Fuentes.

Cuando la onda electromagnética interacciona con algún hidrometeoro (lluvia, granizo, nieve) se produce un cambio en la frecuencia en la onda electromagnética y esto lo mide el radar al detectar de nuevo la onda. Usa el principio del efecto Doppler para medirla. pic.twitter.com/XIgVRKsCrZ

— AEMET Divulga (@AEMET_Divulga) October 31, 2024

En ningún caso estos radares pueden desviar precipitaciones. Estos pulsos electromagnéticos “no tienen la energía necesaria ni siquiera para mover las gotas de agua”, explica Shirley Murillo, subdirectora de la División de Investigación de Huracanes de la Oficina Estadounidense de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, siglas en inglés), a Science Feedback, miembro al igual que Maldita de la International Fact-Checking Network (IFCN).

La AEMET ha desmentido en su cuenta oficial de X que el radar de Morón de la Frontera (o cualquier otro) haya desviado las nubes hacia el Levante para provocar las lluvias. En Maldita.es ya hemos desmentido en otras ocasiones teorías de la conspiración que afirman que estos dispositivos son capaces de modificar el tiempo, como en los huracanes  de Estados Unidos.

📢En relación con una noticia que está circulando mucho en las redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea, #AemetAclara que los radares no sirven para desviar las nubes o la lluvia. #StopBulos. pic.twitter.com/bJAD28TY72

— AEMET (@AEMET_Esp) November 4, 2024

La provincia de Valencia también tiene un radar meteorológico que estuvo operativo durante la catástrofe

Los contenidos desinformadores afirman que un segundo radar meteorológico podría haber desviado estas nubes, “rebotándolas” hacia otra zona de la Península. Aunque en el vídeo se mencionan las estaciones de Alicante y Murcia, la provincia de Valencia cuenta con su propio radar que estuvo en funcionamiento durante el día de las fuertes lluvias

Desde el día después de la catástrofe, comenzaron a circular mensajes por redes sociales afirmando que el radar meteorológico para la provincia de Valencia de la AEMET estuvo inoperativo durante el paso de la DANA del 29 y 30 de octubre de 2024. Sin embargo, es un bulo. Aunque este radar sí sufrió daños por la caída de un rayo en septiembre de 2023, la propia AEMET explica que desde el 28 de octubre está funcionando con un sistema provisional de alimentación energética alternativo. Y afirma que aún si el radar no estuviese funcionando, el traslape de zonas con otros radares cercanos permitiría seguir monitoreando la situación meteorológica en la provincia de Valencia.

Al revisar la información de radar de la AEMET para los días 29 y 30 de octubre, sí hay datos para la provincia de Valencia. 

Información del radar en la provincia de Valencia para el martes 29 de octubre. Fuente: AEMET.

Cuidado con las desinformaciones sobre “derribos de presas”: son azudes y presas pequeñas, de poca altura

En el vídeo viral también se afirma que 2024 es el año que “más presas se han derruido en España” que la “destrucción de embalses y presas de los últimos años” son las responsables de las inundaciones en la provincia de Valencia y que, si siguieran en pie, las consecuencias no serían tan graves. Esta es una desinformación que ha circulado en redes sociales desde el paso de la DANA. En realidad, no se han destruido ni embalses ni grandes presas en la cuenca hidrográfica del Júcar, la más afectada por las inundaciones y que incluye a la provincia de Valencia.

No es posible verificar qué habría ocurrido si el hipotético mundo que imaginan estos contenidos existiera. Sí podemos explicar que se han demolido azudes y pequeñas presas, no embalses o grandes presas, y que se eliminan por seguridad ante inundaciones, por obligación legal y por restauración de ecosistemas. No eliminar estas barreras obsoletas o en mal estado conlleva más riesgo de inundaciones porque se eleva el nivel del agua en zonas no controladas y pueden formarse tapones, según los expertos consultados por Maldita.es.

Además, los azudes derribados en la Demarcación Hidrográfica del Júcar se eliminaron entre los años 2006 y 2021 (último año disponible en los datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico), con Gobiernos de distintos partidos (José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez). En la provincia de Valencia las únicas barreras demolidas se tiraron entre 2006 y 2017, antes del primer Gobierno de Sánchez (2018). Y el azud del Molí Malanya, demolido en 2022 (y por tanto, aún no está reflejado en el geoportal) y situado en el municipio de Bellús. No contaba con titular conocido, por lo que la demolición ha corrido a cargo de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Cuidado también con la narrativa que afirma que la DANA ha sido provocada en “época de cosecha” para favorecer la venta de naranjas de Marruecos

En este vídeo viral se afirma también que “el cambio climático se ceba localmente con tres regiones conocidas por su producción agrícola, en época de cosecha”. Con la DANA también se han viralizado mensajes que aseguran que la DANA en Valencia ha sido provocada para favorecer la venta de naranjas de Marruecos. 

Aunque varios países tienen programas que intentan modificar el tiempo en algunos lugares de forma puntual, estos tienen resultados muy limitados, sin capacidad para crear algo similar a la DANA. Además, la DANA no ha aparecido de la nada, la AEMET llevaba días avisando de ella. Por otro lado, la época de recolección de la naranja se extiende de octubre a junio y solo cuatro de las 15 variedades que se cultivan en la zona se recogen entre octubre y noviembre.

Las situaciones de emergencia son una situación propicia para la aparición de bulos. Así, en Maldita.es seguimos desmintiendo bulos y desinformaciones relacionadas con la DANA y varias teorías de la conspiración desde el pasado martes 29 de octubre. Es fundamental: fíate sólo de fuentes oficiales y, ante la duda, es preferible no compartirlo. Aquí puedes consultar herramientas y fuentes para informarte sobre la DANA que está recorriendo España.

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