Ecoloxistes n’Aición d’Asturies realiza una carrera de relevos por Xixón para exigir transparencia a ArcelorMittal

• Se pide a la compañía que aclare sus planes con respecto a la descarbonización de sus instalaciones en Asturies y la concesión de 450 millones del PERTE de Descarbonización.
• Se exige también el cierre de las baterías de coque, abandonando la idea de destinar su producción a la exportación, y abandonar la idea de la captura de carbono como estrategia para “enverdecer” la empresa.
• La acción se enmarca en la campaña “Shiny Claims, Dirty Flames”, que ha pedido a la siderúrgica en seis países una producción de acero respetuosa con el planeta y los derechos humanos.

Como parte de la campaña internacional “Shiny Claims, Dirty Flames”, Ecoloxistes n’Aición d’Asturies ha desplegado una pancarta frente a las instalaciones de ArcelorMittal en Xixón exigiendo respuestas claras al futuro de la producción de acero en la planta asturiana. La acción ha sido apoyada por la Plataforma contra la Contaminación de Xixón.

La organización ecologista ha realizado un recorrido por diferentes lugares emblemáticos de la ciudad (el monumento “Elogio del horizonte”, el monumento “Sombras de luz” – “Las Chaponas”, el monumento “La madre del emigrante” y el monumento “Solidaridad”) simulando una carrera de relevos, en referencia al patrocinio oficial de ArcelorMittal de los Juegos Olímpicos de París 2024, que la compañía siderúrgica ha tratado de aprovechar para limpiar su imagen con la fabricación de una antorcha y unos aros olímpicos de “bajas emisiones de carbono”. El trayecto ha finalizado frente a las instalaciones que tiene la compañía en Xixón y Avilés, en donde se ha desplegado una pancarta con el lema “Los verdaderos campeones juegan limpio”.

La acción se ha completado con el envío de una carta a Philippe Meyran, CEO de ArcelorMittal Asturias, en la que se le ha exigido, en relación con la planta de Asturies:

• Transparencia sobre el futuro de la planta de Xixón-Avilés: que la empresa aclare definitivamente cómo va a realizar la total descarbonización de la producción de acero y en qué plazos, así como si se va a aceptar el subsidio de 450 millones de euros del PERTE de Descarbonización Industrial y que ese no sea solamente una excusa para reclamar electricidad más barata.
• Fin de las emisiones contaminantes: ArcelorMittal debe afrontar el proceso de descarbonizar su planta de Xixón-Avilés, emprendiendo los compromisos asumidos en el proyecto “Hidrógeno circular DRI”. Asimismo, se exige a ArcelorMittal el cierre de las baterías de coque, abandonando toda idea de dedicarla a la exportación, y que no se considere la captura y el almacenamiento de carbono como una técnica viable para “enverdecer la empresa”, ya que existe una alternativa basada en energías renovables, sin tener que confiar en “falsas” soluciones con múltiples etapas aún sin resolver.

En el marco internacional, se ha pedido que encamine sus objetivos a limitar el incremento de temperaturas globales (respetando la limitación del incremento de la temperatura media global a 1,5ºC recogido en el Acuerdo de París), que deje de priorizar únicamente el beneficio de sus accionistas e invierta en descarbonización y que proteja a las personas trabajadoras y sus comunidades.

Se ha establecido el 23 de agosto de 2024 como plazo para obtener una respuesta por parte de la compañía.

Las campaña en redes sociales se lanzará internacionalmente el martes 23 de julio de 2024 a las 11:00 horas. Puedes seguirlas en los perfiles en las redes sociales de Shiny Claims y, en el caso de la acción estatal, en las de Ecologistas en Acción.

Opacidad en torno a la planta de Asturies

ArcelorMittal proclama con frecuencia su liderazgo climático con actuaciones como el patrocinio de la antorcha olímpica en los Juegos Olímpicos de París 2024, pero la realidad es que muestra gran opacidad en los acuerdos de subsidios, las reclamaciones, el lobby climático y los informes de emisiones. Prueba de ello es que, tras casi un año y medio desde que el Gobierno del Estado español otorgara una ayuda de 450 millones de euros para descarbonizar la planta de Xixón-Avilés, no se han hecho públicas las verdaderas intenciones de la compañía en esta materia. Mientras tanto, cientos de empleadas/os se encuentran sumidos en una situación de gran  incertidumbre. Hasta ahora, se han tomado diferentes medidas en materia de recortes y modificación de las condiciones de trabajo que han afectado fuertemente a su estabilidad económica y familiar, pero la empresa no ha comunicado en ningún momento cuál será su futuro laboral. Por supuesto, la inestabilidad se extiende también a los empleos indirectos que genera la empresa en las regiones en las que opera.

Por otro lado, a pesar de que en los últimos tres años, en términos globales, ArcelorMittal ha asignado 1.500 millones de dólares para conseguir que su negocio funcione de una forma más limpia, apenas ha gastado un tercio de esa cantidad a tal fin. En ese mismo periodo, han destinado 11.000 millones en recompras de acciones y dividendos para los accionistas. Esto muestra una gran irresponsabilidad con nuestro planeta y los acuerdos internacionales que buscan hacer un frente común contra el cambio climático. Son compañías como esta, altamente contaminantes y, por tanto, con gran margen de acción frente al calentamiento global, las que deben asumir su responsabilidad en la crisis ecosocial y contribuir a que se revierta. No en vano, han conseguido sus beneficios empresariales gracias a los medios naturales y humanos de los territorios en los que se asientan.

Además, Ecologistas en Acción muestra su apoyo con los activistas de Extinction Rebellion Asturies que, por una protesta pacífica realizada hace unos meses, se enfrentarán este jueves a peticiones de multa y cárcel. Ninguna protesta pacífica debería estar perseguida más incluso que la falta de medidas para afrontar la emergencia climática.

ArcelorMittal, desafiado en seis países a ofrecer una producción de acero limpia, justa y sostenible

A pocos días de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024, en seis países de dos continentes, defensores del medioambiente, activistas y comunidades están desafiando a ArcelorMittal para que limpie su negocio sucio en una serie de acciones desarrolladas cerca de las instalaciones que la compañía tiene en España, Liberia, Francia y Bosnia y Herzegovina. Al mismo tiempo, cuestionan su liderazgo en Luxemburgo y Reino Unido. Lo han hecho bajo el paraguas de la campaña “Shiny Claims, Dirty Flames”.

ArcelorMittal es patrocinador oficial de los Juegos Olímpicos, una oportunidad que ha aprovechado para mostrar una antorcha y unos anillos de acero con “bajas emisiones de carbono”. Sin embargo, la compañía se enfrenta a un desafío sin precedentes: ir más allá de los trucos publicitarios y ser un verdadero campeón en descarbonización y derechos humanos.

Para enfrentar este reto, la coalición de manifestantes exige a la empresa una serie de acciones inmediatas: inversiones en tecnología moderna de control de la contaminación en todas sus plantas; pagos de compensación a agricultores y comunidades que han perdido sus medios de vida debido a la minería de hierro de la empresa; y medidas reales para la descarbonización de la producción de acero con hidrógeno verde para pasar a producir acero con emisiones casi nulas.

El cuestionable historial de ArcelorMittal

La familia Mittal posee más del 42 por ciento de la empresa, que cotiza en bolsa y que en los últimos tres años ha donado generosamente 11.000 millones de dólares a los accionistas en forma de recompra de acciones y dividendos. Mientras tanto, la compañía apenas gastó un tercio de los 1.500 millones de dólares anunciados para llevar a cabo sus planes de descarbonización en el mismo periodo.

“Que ArcelorMittal realmente se limpie no es solo una cuestión de tecnología, sino de dinero y liderazgo. Son sus valores y su dinero, por lo que hacemos un llamado a los Mittal para que den un paso al frente y cumplan”, afirmó Caroline Ashley, directora ejecutiva de Steelwatch.

“Se ha producido una sucesión de denuncias durante la gira de la antorcha olímpica que comprenden la contaminación del aire en Bosnia, el uso de carbón ruso en la India y el presunto fraude en el esquema de comercio de emisiones de la UE. Si la producción de acero fuera una disciplina olímpica, no otorgaríamos una medalla a ArcelorMittal”, dijo Pascal Husting, portavoz de Shiny Claims, Dirty Flames.

“Esta es la primera vez que grupos de varios países se reúnen para desafiar colectivamente a un fabricante de acero a mejorar su juego en materia de cambio climático y derechos humanos. Los grupos nacionales ya no están aislados en sus luchas y, aunque la empresa ahora nos escucha, todavía estamos esperando que actúe”, dijo John Brownell, portavoz de Fair Steel Coalition y director de Green Advocates en Liberia.

Galería con imágenes de la acción en Xixón

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