El cierre de El Retiro y otros parques de Madrid por alertas de calor y viento: preguntas y respuestas

Con la llegada del verano y las altas temperaturas, los ayuntamientos de todas las ciudades toman medidas para paliar los efectos de los episodios de calor extremo y condiciones meteorológicas adversas. Madrid incluye en sus protocolos de actuación desde 2019 el cierre total o parcial de algunos parques si se cumplen una serie de requisitos relacionados con la temperatura, el viento y la humedad.

Según los datos facilitados por el Ayuntamiento de Madrid a Maldita.es, en 2023 se han producido 4 alertas rojas durante las que se han registrado 13 incidencias (2 árboles caídos y 11 ramas). La última, el domingo 25 de junio, en la que se cerraron hasta diez parques en toda la capital para prevenir riesgos ante la ola de calor anunciada para estas fechas y al cumplirse con las rachas de viento previstas en el protocolo.

En 2022 las cifras son las siguientes: 11 alertas rojas con 142 incidencias (17 árboles caídos, 123 ramas caídas y 2 árboles talados por riesgo de caída). Durante 2020, antes de la borrasca Filomena, hubo 13 alertas rojas en las que se cayeron 75 ramas y 10 árboles con los parques cerrados.

¿Cuáles son los niveles de alerta del Ayuntamiento de Madrid?

El protocolo de actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas y de gestión de incidencias causadas por el arbolado en los Jardines del Buen Retiro establece cuatro niveles de alerta para nieve y viento. También se aplica a otros parques, según explica el Ayuntamiento de Madrid en su página web. Cuando se activa la alerta roja también se cierran los parques de El Capricho, Jardines de Sabatini, la Rosaleda del Parque del Oeste, Juan Carlos I, Juan Pablo II, Quinta de Fuente del Berro, Quinta de los Molinos y Quinta Torre Arias.

Este protocolo fija unos valores máximos y mínimos en determinadas variables que permite determinar en qué nivel de alerta se encuentran los Jardines del Buen Retiro. Estas variables son: velocidad de la racha máxima de viento (en kilómetros por hora), temperatura máxima diaria (en grados centígrados) y la humedad de suelo (medida como Agua Disponible o AD para las plantas). En el caso de la nieve se mide el espesor de la nieve acumulada en 24 horas.

Cuadro resumen de umbrales de alerta establecidos en el protocolo de actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas.

¿Quién decide en qué nivel de alerta nos encontramos?

Los diferentes niveles de alerta se definen en función de las previsiones facilitadas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Las variables meteorológicas que contempla este protocolo son: la nieve y el viento. En caso de alerta por nieve, AEMET enviará un aviso siempre que esté previsto que se supere alguno de los umbrales correspondientes a alertas amarilla, naranja o roja. En el caso de vientos, por el contrario, AEMET elabora y envía diariamente un aviso específico. El contenido de estos boletines será el que marque la activación de alertas.

Boletín de la AEMET remitido al Ayuntamiento de Madrid con la predicción del martes 2 de agosto de 2022 obtenido vía transparencia.

El protocolo establece que, en caso de que haya diferentes niveles de alerta para los distintos factores meteorológicos, se considerará el más alto de ellos a la hora de definir la fase del protocolo que debe activarse.

¿Cuándo se activa el protocolo de actuación y en qué consiste?

El nivel de alerta verde se corresponde con la fase de normalidad, en la que las autoridades competentes no deben intervenir puesto que las predicciones meteorológicas no hacen prever la ocurrencia de sucesos que puedan afectar negativamente al arbolado. Cuando se activa la alerta amarilla, naranja o roja se inicia la fase de intervención: adopción de medidas preventivas para evitar incidencias debidas a la eventual caída de ramas o árboles. Para cada nivel de alerta se imponen diferentes medidas de prevención:

Cuadro resumen con las medidas preventivas para cada nivel de alerta establecidas en el protocolo de actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas.

El inicio de la fase correspondiente se establece dos horas antes del momento en que esté previsto que se produzcan las condiciones meteorológicas que dan lugar a la alerta. Se informa a la ciudadanía sobre las alertas y recomendaciones por varios medios: la página web del Ayuntamiento de Madrid, la Red de Atención a la Ciudadanía Línea Madrid, los medios de comunicación, redes sociales y cualquier otro medio disponible.

¿Cuándo finalizan las medidas de prevención?

En el protocolo se contempla la fase de vuelta a la normalidad. Esta fase es consecutiva a la de intervención y su duración está condicionada por el grado de afección a las instalaciones. Se divide en dos períodos:

Esta fase implica mantener el parque cerrado, por completo o en determinadas zonas. Además, el protocolo establece que los trabajos en esta fase nunca se llevarán a cabo en situación de alerta naranja o roja.

¿Desde cuándo se aplican estas medidas?

El protocolo de actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas actual vigente fue aprobado en 2019 durante el Gobierno municipal presidido por Manuela Carmena (Ahora Madrid).

Sin embargo, este no es el primer protocolo de actuación aplicado en los parques de la capital. “En 2014, se produjeron dos hechos dramáticos en El Retiro que llevaron a poner en marcha el primer protocolo de actuación”, explica a Maldita.es el Área de Medioambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. Falleció un hombre de 38 años al caerle una rama encima y una niña de siete años resultó herida por el mismo motivo. Este primer protocolo comenzó a aplicarse en mayo de 2016 y estaba incorporado al Plan Director de Arbolado de los Jardines del Buen Retiro.

Dos años más tarde, en marzo de 2018, falleció un niño de cuatro años tras caerle encima un árbol dentro de las instalaciones del parque. “Se procedió a realizar una importante revisión del contenido del protocolo previo y se modificó”, asegura a Maldita.es el Área de Medioambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. Este nuevo protocolo, actualmente vigente, se aprobó el 6 de junio de 2019, con el objetivo de prevenir las “incidencias que puedan producirse relacionadas con el riesgo de caídas de ramas o árboles u otros riesgos derivados de las fuertes rachas de viento, lluvia o nieve”.

En la imagen de portada, la foto del fondo es del Ayuntamiento de Madrid.