Hay contenidos que afirman que la DANA que afectó a la Comunidad Valenciana y otras partes de España en octubre de 2024 no fue natural. Existen diferentes teorías de la conspiración que afirman, por ejemplo, que ha sido un ataque provocado para perjudicar al campo español y favorecer la venta de productos de Marruecos. Estas son todas las desinformaciones que se han viralizado estos días en las que se afirma que no es un fenómeno natural:
“Los radares desviaron las nubes a la provincia de Valencia”. Esta teoría afirma que estos aparatos desplazan las nubes con impulsos electromagnéticos. Se acusó directamente al dispositivo ubicado en Morón de la Frontera (Sevilla) de provocar la DANA.
“Un ataque meteorológico HAARP”. Defiende que este emisor de radio que estudia una capa alta de la atmósfera se utiliza para alterar el tiempo atmosférico, en este caso, a través de embarcaciones atracadas en las costas de Valencia días antes de la catástrofe.
“Culpa de los chemtrails”. Según esta conspiración, nos “fumigan” con aviones para manipular el clima o envenenar a la población.
Qué sabemos: En realidad, no existe ninguna tecnología capaz de controlar y manipular el clima hasta el punto de generar y dirigir desastres medioambientales (y mucho menos de este calibre) como un ataque.
Una reflexión: Si realmente se hubiera creado tal mecanismo, ¿por qué no se está utilizando como arma en las diferentes guerras que se disputan hoy en día? ¿Tiene la tecnología Marruecos, pero no la tienen Israel o Rusia?
Los radares meteorológicos sirven para localizar tormentas y seguir su evolución, pero no pueden desviar las precipitaciones
Los días posteriores a la catástrofe, comenzaron a circular contenidos que afirmaban que el radar meteorológico de Morón de la Frontera (Sevilla) había desplazado hacia la provincia de Valencia las nubes que provocaron la DANA. Según esta teoría (que no aporta ninguna prueba), estos detectores metereológicos son capaces de “desplazar” y “deshacer” nubes con “impulsos electromagnéticos”. En realidad, estos dispositivos sirven para localizar tormentas y seguir su evolución, pero no pueden desviarlas.
Un radar de esas características emite pulsos electromagnéticos con una longitud de onda determinada para detectar gotas de agua, nieve o granizo. Cuando estas ondas interaccionan con alguno de estos elementos, rebotan de nuevo al radar con un cambio de frecuencia. Aquí puedes consultar una descripción más extensa y detallada de cómo funciona esta herramienta. La AEMET también desmintió este bulo en su cuenta oficial de Twitter (ahora X).
📢En relación con una noticia que está circulando mucho en las redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea, #AemetAclara que los radares no sirven para desviar las nubes o la lluvia. #StopBulos. pic.twitter.com/bJAD28TY72
— AEMET (@AEMET_Esp) November 4, 2024Relacionado con la DANA, también se ha viralizado una imagen de un radar de lluvia junto a mensajes que afirman que se pueden ver “nubes estáticas y puntiagudas”. Esta imagen tampoco justifica que las lluvias torrenciales fueran provocadas por ninguna tecnología. Estas líneas rectas son falsos ecos: interferencias o errores en su funcionamiento que ocurren de forma habitual en estos radares, independientemente de este episodio de lluvias. Estas interferencias se producen por el oleaje del mar, humo o redes wifi, entre otras. Estas interferencias en los radares se han usado en otras ocasiones para desinformar.
HAARP es un programa científico que estudia una capa elevada de la atmósfera y no afecta al tiempo en la superficie terrestre
El día después de la catástrofe (30 de octubre) se empezaron a viralizar contenidos que afirmaban que se había utilizado el proyecto HAARP para provocar las lluvias torrenciales en Valencia. Aseguran que un barco estuvo en la costa de Valencia antes de la DANA y lo señalan como responsable de las inundaciones. Estos mensajes forman parte de una teoría de la conspiración que sostiene que el Programa de Investigación de Auroras Activas de Alta Frecuencia (HAARP, por sus siglas en inglés) puede modificar el clima.
HAARP es un emisor de radio que se encuentra en Alaska (Estados Unidos) que investiga la ionosfera, una capa superior de la atmósfera terrestre. En ningún caso tiene capacidad para afectar al clima o el tiempo atmosférico porque su señal no afecta a las capas bajas de la atmósfera (donde se originan los fenómenos meteorológicos). Y, para poder influir, el sistema necesitaría mucha más energía de la que emplea, según explicaron varios expertos a Maldita.es.
Además, te contamos otros dos hechos importantes que explican por qué la DANA de octubre en Valencia no fue provocada:
No llegó de imprevisto a España. La AEMET avisó de las fuertes lluvias en la zona del Mediterráneo varios días antes de la catástrofe. Los primeros avisos llegaron el miércoles 23 de octubre (casi una semana antes), aunque todavía no se podía determinar en qué zonas descargaría el agua. El domingo 27, la agencia ya alertó de que el martes 29 sería el “día álgido”, con mayor probabilidad en el área mediterránea. Aquí puedes consultar la cronología completa de esta DANA.
Las imágenes del barco que se han viralizado no se tomaron en las costas de Valencia. Este vídeo (que muestra una central de energía flotante) se grabó en Las Palmas de Gran Canaria el 24 de septiembre de 2024, un mes antes de los primeros avisos de la llegada de la DANA a España. Y esta otra imagen está sacada de un vídeo publicado en 2017 y grabado en Estambul (Turquía).
Las estelas de los aviones no son chemtrails, sino vapor de agua congelado por las bajas temperaturas
En los últimos días también se han visto mensajes que vinculan a los chemtrails con la aparición de la DANA. Esta teoría de la conspiración asegura, sin evidencias, que los aviones fumigan sustancias químicas peligrosas sobre la superficie con fines como envenenar a la población o modificar el clima. Los chemtrails son, según esta teoría, las estelas blancas que se observan en el cielo cuando pasa un avión.
Sin embargo, tienen una explicación: la quema de combustible en los motores de los aviones produce grandes cantidades de vapor de agua que al entrar en un ambiente frío (los aviones vuelan a alturas donde el aire se encuentra a -35°C o menos) forma gotas y cristales de hielo. Es decir, se condensa formando una estela (llamada contrail o condensation trail). Tranquilo si has visto imágenes de aviones con estas estelas en las alas y no en el motor, porque tampoco significa que nos están “fumigando”. En algunos casos, el agua contenida en el aire que recorre el avión se condensa en las puntas de las alas por la mayor presión.
Además, el meteorólogo de la AEMET y divulgador Benito Fuentes explica que el volumen de las precipitaciones que se ha registrado sería de unos 700 mil millones de litros de agua y “no hay avión que pueda manejar tal cantidad”. Y añade que, para evaporarla y desplazarla hacia la tierra, haría falta una cantidad de energía que equivale a más del doble de lo que se produce en España en un año o a la que generan 25.000 bombas nucleares.
…recogida asciende a 30 x 23255 x 1000000 = 697 650 000 000. ¡¡Casi 700 mil millones de litros de agua!!
— Benito Fuentes (@metbeni) October 30, 2024
Es imposible explicarle a un conspiranoico que no hay avión o polvos mágicos que puedan manejar tal cantidad. Ha visto demasiadas películas. pic.twitter.com/NMGaTnl67ZLas otras veces que se acusó al proyecto HAARP, a los chemtrails y a los radares de provocar desastres naturales
No es la primera vez que se han utilizado estas teorías de la conspiración para justificar algún desastre natural ocurrido en otro país. Por ejemplo, se acusó (sin ninguna evidencia) a las torres de radar meteorológico de modificar el tiempo y provocar y controlar los huracanes en Estados Unidos.
En septiembre de 2023, la tormenta Daniel reventó dos presas en la ciudad de Derna (en la costa oriental de Libia), a unos 1.300 kilómetros al este de la capital (Trípoli). Las inundaciones causaron miles muertos. Entonces se culpó (también sin aportar evidencias) al proyecto HAARP de provocar las lluvias que desencadenaron esta tragedia.
También se le ha culpado de causar terremotos. Cuando, en realidad, HAARP no afecta a las placas tectónicas que los producen. No hay manera en la que las ondas de radio de este sistema estadounidense puedan provocar efectos en terreno sólido, según los expertos consultados por Maldita.es.
Los chemtrails también es una narrativa recurrente en períodos de sequía. Una versión de la conspiración de la “sequía provocada” es que con esta supuesta “fumigación” desde aviones se altera el patrón de lluvias para que no llueva en España y sí en Marruecos (para promover la agricultura en el país africano a costa del sector primario español). Incluso se han llegado a utilizar fotografías para “probar” esta teoría, pero como ya hemos contado en Maldita.es estas imágenes no demuestran que se controle el tiempo. En este ejemplo, son reales pero muestran distintos estadios de un anticiclón que llegó a España en febrero de 2024.
Las técnicas de modificación artificial del tiempo actuales no tienen la capacidad de provocar una DANA
Si bien es cierto que a lo largo de la historia se han llevado a cabo experimentos para modificar el tiempo (que no el clima) de forma artificial, no tienen la capacidad de provocar lluvias torrenciales como las que se registraron en Valencia el 29 de octubre. Actualmente, hay países que tienen en marcha programas para hacerlo de forma puntual en algunos lugares. Una de estas técnicas reales (que no se llama geoingeniería) es la siembra de nubes con yoduro de plata. Se trata de un método utilizado para intentar que el granizo caiga más pequeño y no dañe los cultivos o para aumentar la lluvia.
Su eficacia no está clara y la AEMET recalca que pueden llegar a incrementar las lluvias un 20% “en el mejor de los casos”. Pero no pueden provocar nada similar a una tormenta de granizo o a una DANA y mucho menos dirigirla hacia un punto concreto. Si Marruecos de verdad tiene tecnología suficiente para destruir el sector agrícola español provocando tormentas, ¿por qué no están haciendo lo mismo otros países que tienen más recursos que Marruecos? Y, si existiera una tecnología capaz de provocar inundaciones, terremotos o cualquier catástrofe natural, ¿por qué no se está empleando en conflictos armados?
Las situaciones de emergencia son momentos propicios para la aparición de bulos. Así, en Maldita.es seguimos desmintiendo bulos y desinformaciones relacionadas con la DANA y varias teorías de la conspiración desde el pasado martes 29 de octubre. Es fundamental: fíate sólo de fuentes oficiales y, ante la duda, es preferible no compartirlo. Aquí puedes consultar herramientas y fuentes para informarte sobre la DANA que está recorriendo España.