La cosecha de miel, bajo mínimos: la producción cae un 50% por la sequía, el calor y las enfermedades

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cosecha miel España

Los apicultores han cerrado uno de sus peores años. La situación es crítica para ellos, como reconocen las asociaciones consultadas por Newtral.es, que cuantifican los daños: en 2022 España perdió un 50% de su cosecha de miel, según la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA).

Esta semana, miles de apicultores han protestado en varias comunidades autónomas para reclamar al Gobierno una salida a esta crisis. Al calor excepcional de este año, los trabajadores de la miel han añadido a su lista de preocupaciones el elevado coste del transporte de las colmenas, que ha encarecido su producción.

Te contamos cómo está afectando al sector la doble crisis climática y económica que está viviendo el campo en España.

España pierde miel desde 2018

De Murcia a Asturias, pasando por Andalucía, Cantabria, la Comunidad Valenciana o Castilla y León, los apicultores llevan más de una semana manifestándose en distintos puntos de España para reclamar mejoras. Este viernes 10 de febrero lo harán también en Cataluña y Aragón.

Asociaciones como la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) exigen al ministerio más ayudas para intentar compensar “el sobrecoste de mantenimiento de las colonias de abejas y la pérdida de producción” y piden que se les incluya en la prórroga de la ayuda de 20 céntimos por litro de gasóleo, ya que “el combustible es uno de los costes de producción que condicionan más la cuenta de resultados”.

UPA calcula que la cosecha de miel se ha reducido un 50% este último año, entre otras cosas, porque los apicultores están centrando gran parte de sus esfuerzos en recuperar las colmenas y no tanto en producir miel.

De hecho, la situación se ha “agravado” en los últimos años, como cuenta Pedro Loscertales, responsable del sector apícola de COAG. España lleva acumulando pérdidas en la producción de miel desde 2018. El mercado español pasó de registrar 36.394 toneladas en ese año a las 28.000 en 2021, “muy por debajo de la media de los últimos cinco años“, según el último informe de Mercasa, la empresa pública que gestiona los mercados centrales del país.

¿Por qué hay menos miel? Por los efectos de la doble crisis climática y económica 

Las asociaciones consultadas por Newtral.es atribuyen este descenso a varios factores. Las altas temperaturas registradas en 2022 han hecho mella en las colmenas: “La sequía, la falta de humedad y el calor extremo han hecho que las plantas produjesen mucho menos néctar y las abejas, por tanto, no lo han podido aprovechar”, explica Loscertales.

“En algunas zonas de Extremadura y Andalucía, por ejemplo, las altas temperaturas derretían la cera de las colmenas, que se ponían blandas y caían, y eso ha acabado dejando miles de colmenas sin actividad y abejas asfixiadas dentro”, comenta Antonio Prieto, responsable de Apicultura de UPA. Eso también ha impedido que las propias abejas pudieran, en muchos casos, humidificar, ventilar y refrigerar estos espacios.

Prieto también hace hincapié en los sobrecostes que les ha generado la inflación de los insumos (bienes utilizados para producir otros productos) este año. “Al hacer trashumancia, tenemos que recorrer miles de kilómetros para trasladar las colmenas. Al principio, nos beneficiábamos de la bonificación de los 20 céntimos a la gasolina, como todo ciudadano, pero el ministerio nos ha dejado fuera de la subvención para este año”.

Además, enfermedades como la varroosis, provocada por un ácaro “que afecta tanto a la cría como a las abejas adultas”, como explican en el Ministerio de Agricultura, han provocado estragos en las cosechas: “Llevamos conviviendo con ella más de 40 años, pero se ha ido agravando por la falta de soluciones para su tratamiento porque somos un sector minoritario y no interesa tanto investigar”, denuncia Loscertales.

Los apicultores denuncian que no pueden competir con la miel china, mucho más barata en origen

A todo esto, los apicultores han tenido que sumar otro problema: salvar la competencia con países más baratos. “Importamos mucho más de lo que producimos y con una cosecha tan limitada, estamos incrementando aún más la cantidad de producto que traemos de fuera, sobre todo de países como China, con precios irrisorios, pero de peor calidad”, apunta Prieto.

En total, en 2021 se importaron 31.620 toneladas de miel, la mayor parte desde el país asiático, que es nuestro mayor proveedor de este producto: casi el 90% del total que compramos desde España viene de allí, según el informe de Mercasa de 2022.

¿Y a qué precio? Ahí está la clave: si a un apicultor español el kilo de este producto le costó en noviembre 3,7 euros (el precio en origen), las empresas están comprando miel a operadores chinos por menos de un euro y medio. A esos precios, explican los apicultores a Newtral.es, es muy difícil competir.

La Unión Europea ha endurecido el uso de insecticidas para proteger a las abejas

La situación de estos insectos en España no es excepcional: la supervivencia de las abejas está amenazada también en el resto de la Unión Europea. Tanto es así, que la propia Comisión anunció el 2 de febrero una serie de restricciones en el uso de insecticidas que se utilizan en los cultivos agrícolas estableciendo límites máximos para proteger a los polinizadores.

Asociaciones ecologistas como Greenpeace llevan años advirtiendo del riesgo que implica el uso de estos productos químicos en los cultivos, ya que suponen “una seria amenaza” para la supervivencia de las abejas y otros polinizadores.

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