La curva de Laffer y la dudosa relación entre bajar impuestos para recaudar más

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La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Diaz Ayuso, hizo referencia a las deducciones de impuestos realizadas en la región durante una entrevista en Herrera en COPE el 12 de abril. En concreto, Ayuso aseguró que “siempre que hemos bajado los impuestos en Madrid hemos recaudado más porque hemos reactivado, estimulado la economía” (min. 21:41).

La dirigente autonómica repitió esta declaración en El Independiente unos días más tarde. “Hasta la fecha, cada vez que hemos reducido el IRPF, siempre hemos tenido un efecto de mayor recaudación porque aflora la economía, la incentiva, anima a contratar…”, dijo el 16 de abril. Y no es la única que defiende la relación entre bajar impuestos y aumentar la recaudación. Fernando Clavijo, candidato de Coalición Canaria a la Presidencia en el archipiélago, destacó en un tuit del 18 de abril que en su anterior mandato redujeron “todos los años los impuestos”, algo que les hizo “recaudar más”.

Esta relación entre aumentar la recaudación mediante las bajadas de impuestos se basa en lo que se conoce como “curva de Laffer”, según señalan los expertos consultados por Newtral.es. O, más bien, a la interpretación de este instrumento. Como explica a este medio Amadeo Fuenmayor, director de la Cátedra de Tributación Autonómica de la Universidad de Valencia, “según esta hipótesis, al reducir impuestos hay más liquidez en manos de los ciudadanos, lo que reactiva la economía y acaba generando mayores tasas de crecimiento”.

Sin embargo, hay otros muchos factores que influyen sobre el incremento de los ingresos tributarios. Por ejemplo, la inflación o la reducción del gasto. Algo que hace muy complicado aislar el efecto de las variaciones impositivas del contexto económico en el que se producen e impide comprobar el cumplimiento de la curva de Laffer en la práctica.

En qué consiste la curva de Laffer

Como explica Ángel de la Fuente, director ejecutivo de Fedea, la curva de Laffer “relaciona la recaudación total por un impuesto determinado con el tipo de gravamen”. En concreto, busca estudiar cómo varía la recaudación según cambia el tipo impositivo. “Sabemos seguro dos puntos de esta curva: cuando tú tienes un tipo impositivo de cero no recaudas nada porque no hay impuesto, y si pones un tipo impositivo del 100% tampoco recaudas nada porque nadie trabajará en blanco”, explica De la Fuente.

Al saber dónde empieza y dónde termina la curva de Laffer, se concluye que, con impuestos entre el 0% y el 100%, los valores de la recaudación son mayores de cero. “Por lo tanto en algún momento [la curva] tendrá que girar hacia abajo”, expone el experto.

Sin embargo, el problema se plantea a la hora de encontrar ese nivel de impuestos en el que la curva llega al máximo de la recaudación y a partir del cual empieza a descender, según Jorge Onrubia, profesor de Hacienda Pública de la Universidad Complutense de Madrid e investigador asociado en Fedea. Onrubia cree que este punto es “imposible de estimar empíricamente”.

“No tenemos lo que llamamos contrafactualidad”, incide, algo que supondría disponer no solo del dato de una realidad determinada —por ejemplo, el de presión fiscal y de recaudación real en 2022—, sino también de cuál hubiera sido la recaudación si dicha presión fiscal “hubiera sido un punto menos o un punto más”.

Aislar el efecto de la subida de impuestos sobre la recaudación, el obstáculo para estimar la curva de Laffer

Si bien el escollo de la contrafactualidad se intenta resolver mediante estimaciones, en este caso Onrubia no lo considera viable. Como indica, para evaluar si la variación del tipo impositivo influye sobre la recaudación existen dos opciones: comparar el dato concreto o con otros países o con otros períodos. Sin embargo, ambas alternativas incluirían muchos factores a tener en cuenta más allá de la propia bajada de impuestos. “Es una relación espuria”, sentencia.

De la misma forma se pronuncia José Emilio Boscá, investigador de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y profesor de la Universidad de Valencia, quien opina que “aislar los efectos puros de un cambio en los impuestos (...) es mucho más sofisticado que simplemente decir: ‘Cuando he bajado los impuestos, he visto que unos meses después subía la recaudación’”. De esta forma, como ejemplifica, si se bajan los impuestos en un momento de recesión económica, previsiblemente se registrará una caída de la recaudación.

El contexto económico influye sobre la recaudación, además de los impuestos 

Así pues, existen distintos factores que pueden generar una mayor recaudación en un contexto de reducción de impuestos, como el propio desarrollo de la actividad económica. Según Luis del Amo, secretario técnico del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), actualmente los ingresos suben “por la inflación”, como ocurre con el IVA, que depende del precio de los productos.

Se muestra de acuerdo con él Javier Collado, profesor de Tributación y Asesoría Fiscal del Centro de Estudios Financieros de la Universidad a Distancia de Madrid (Udima). “El principal factor por el que se ha recaudado más en todas las comunidades autónomas ha sido por la inflación”, indica.

Asimismo, como subraya Javier de la Nava, profesor de Macroeconomía de la Universidad a Distancia de Madrid (Udima), se percibe un aumento en la recaudación en los últimos ejercicios a causa de su caída durante la pandemia. Por ello, existen otros elementos que, incluso sin modificar los impuestos, pueden hacer que la recaudación incremente o se reduzca. De hecho, de acuerdo con este experto, “no hay una evidencia empírica donde se diga que como consecuencia de ese descenso en el gravamen, al año siguiente solo por eso hay un incremento de la actividad económica y, por lo tanto, una mayor recaudación”.

Las comunidades autónomas tienen competencias para reducir algunos impuestos, no todos

De acuerdo con Del Amo, la recaudación de las autonomías de régimen común procede de las transferencias del Estado en IVA o IRPF (los dos grandes impuestos por recaudación, como se recoge en los Presupuestos Generales del Estado), de impuestos cedidos, como el de patrimonio, y de impuestos propios. Como excepción, la Comunidad de Madrid, que carece de estos últimos, como se recoge en la página web del Ministerio de Hacienda y Función Pública.

Las comunidades no tienen competencias sobre todos ellos, ya que algunos, como el IVA, son gestionados directamente por el Estado, que luego lo distribuye entre las diferentes regiones. En otros, como el de Patrimonio, Sucesiones y Donaciones, las autonomías son las encargadas de recaudar el ingreso total y pueden variar los tipos impositivos, como cuenta a Newtral.es Carmen Jover, presidenta de la Comisión de Fiscalistas del Colegio de Economistas de Cataluña, incluso “hasta hacerlos desaparecer si lo bonifican al 100%”. Así ocurre, de hecho, en Cantabria, donde los parientes más cercanos no tienen que pagar nada.

Reducir impuestos puede bajar el incentivo al fraude y atraer inversión

Aun así, reducir impuestos puede ir asociado a efectos positivos para la recaudación. De acuerdo con Collado, cuando se bajan impuestos “hay menos incentivo al fraude”. “Conforme los impuestos se van bajando, tienes menos incentivo porque si te pillan va a ser peor que haberlo pagado”, explica.

Además, según este experto, las bajadas de tributos pueden incentivar la inversión en una zona determinada. A causa de ello, las grandes empresas pueden decantarse por las ciudades que menos impuestos tienen a la hora de decidir el lugar donde instalar su sede.

No obstante, a juicio de Del Amo, la movilidad de la inversión según los impuestos de cada zona se debe a que existen diferencias entre la fiscalidad de las diferentes regiones. “Si todas las comunidades hicieran eso [minimizar impuestos], toda la recaudación de patrimonio se perdería y ninguna ganaría nada porque ya no habría ese factor diferencial”, apunta.

Pese a todo, en la decisión de invertir en una zona y no en otras también juega un papel destacado el peso de la capitalidad, como ocurre en el caso de Madrid. Según Fuenmayor, esta comunidad tiene una mayor capacidad para bajar impuestos que otros territorios debido a que “gasta menos” en algunas partidas y “a que recibe más gasto del Estado en infraestructuras”.

Fuentes

Entrevista a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Diaz Ayuso, en ‘Herrera en COPE’ el 12 de abril

Entrevista a Díaz Ayuso en ‘El Independiente’ publicada el 16 de abril

Tuit del candidato de los conservadores de Coalición Canaria a la Presidencia en el archipiélago, Fernando Clavijo Batlle, del 18 de abril relacionando la bajada de impuestos en las islas con el aumento de la recaudación

Amadeo Fuenmayor, director de la Cátedra de Tributación Autonómica de la Universidad de Valencia

Ángel de la Fuente, director ejecutivo de Fedea

Jorge Onrubia, profesor de Hacienda Pública de la Universidad Complutense de Madrid e investigador asociado en Fedea

José Emilio Boscá, investigador de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y profesor de la Universidad de Valencia

Luis del Amo, secretario técnico del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF)

Javier Collado, profesor de Tributación y Asesoría Fiscal del Centro de Estudios Financieros de la Universidad a Distancia de Madrid (Udima)

Javier de la Nava, profesor de Macroeconomía de la Universidad a Distancia de Madrid (Udima)

Presentación del proyecto de los Presupuestos Generales del Estado 2023

Recopilación de los tributos propios autonómicos en la página web del Ministerio de Hacienda y Función Pública

Carmen Jover, presidenta de la Comisión de Fiscalistas del Colegio de Economistas de Cataluña

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