¡No necesitamos macrocentrales!

11 months ago 86

El año pasado el Instituto Valenciano de la Competitividad Empresarial (IVACE), órgano de la Consellería de Economía, publicó el informe titulado «Aprovechamiento Fotovoltaico en la Comunidad Valenciana», elaborado por el Instituto Tecnológico de la Energía (ITE), y a pesar de su importancia y de la avalancha de proyectos de macrocentrales fotovoltaicas (ftv), pasó prácticamente desapercibido e ignorado. El objetivo era «identificar los municipios cono mayor potencial fotovoltaico, así como seleccionar aquellos más favorables para promover lo autoconsumo en su modalidad individual o bien para la constitución de comunidades energéticas locales basadas autoconsumo colectivo».

Para hacer el informe, los técnicos del ITE calcularon primero las superficies cubiertas que hay en la Comunidad Valenciana (CV), pueblo por pueblo, después estimaron la proporción útil para instalar las placas ftv y finalmente, considerando la radiación solar que recibe cada municipio, calcularon la electricidad ftv que pueden producir. En tabla de la página 71 suman y calculan que la CV puede producir hasta 22.881 Gwh/año de electricidad fotovoltaica con las cubiertas útiles.

El siguiente paso lógico habría sido averiguar el consumo eléctrico de cada municipio o comarca y el total de la CV para comparar y ver las posibilidades reales de autoabastecimiento y priorizarlas. No lo han hecho (!?), o al menos no lo han publicado, pero resulta muy fácil, simplemente tenemos que ir a las estadísticas del IVE o las de REE y allí encontramos que en 2021 la CV consumió 27.051 Gwh/año de electricidad.

Es bastante más que la potencial producción ftv sobre las cubiertas útiles, pero tenemos que considerar que más del 18% de la electricidad que consumimos actualmente proviene ya de fuentes renovables que no se tienen que sustituir, de modo que el consumo de electricidad sucia en la CV es de unos 22.182 Gwh/año, ligeramente inferior a la potencial producción ftv… O sea que las placas solares sobre cubiertas, sin ningún impacto ambiental, podrían autoabastecernos de electricidad y todavía sobrarían centenares de Gwh para exportar. Incluso podríamos cerrar definitivamente la peligrosa central nuclear de Cofrentes (no olvidemos Fukushima, Chernóbil, Harrisburg, Windscale, Maiak, …), que amenaza a valencianos y manchegos y vomita continuamente residuos radiactivos que serán peligrosos durante siglos.

Pero somos el país del Sol y podemos producir todavía más electricidad ftv, porque el informe sólo considera las superficies cubiertas y aquí tenemos otras grandes superficies de aparcamientos, estaciones, autopistas, autovías, canales, embalses y suelos muy degradados donde podrían instalarse millones de placas solares sin arrancar ni un solo árbol ni hormigonar la tierra. Tampoco entiendo demasiado por qué no han calculado estas superficies, aunque fuera aproximadamente, puede ser porque tendrían que recorrer físicamente toda la CV o porque todavía mostraría más claramente las inmensas posibilidades de la energía solar aquí. Sin duda serán millones de m² útiles y miles de Gwh/año lo que podrían aportar estas otras superficies muy antropizadas y degradadas.

Por otro lado, y más importante todavía, aplicando bien el ahorro y la eficiencia podemos reducir significativamente el consumo de energía y ahorrar recursos y dinero, manteniendo o incluso elevando la calidad de vida. Mejorando los procesos industriales, instalando dobles cristales en las ventanas, poniendo buen aislamiento en los edificios, regulando suavemente climatizadores, fomentando los electrodomésticos A++, prohibiendo la obsolescencia programada, aprovechando la luz y temperatura naturales, etc. podemos ahorrar fácilmente más del 10% de la electricidad que consumimos, lo cual nos permitirá exportar más energía o instalar menos placas.

Obviamente no es suficiente con las energías renovables sobre cubiertas útiles y algunos suelos muy degradados, ni añadiendo el ahorro y la eficiencia, necesitamos también buenos sistemas para almacenar la energía eléctrica sobrante de día y disponer de ella durante las noches, los días nublados, más cortos y sin viento. Para eso tenemos ya la central hidráulica reversible de la Muela de Cortes, que complementa la nuclear de Cofrentes, y la térmica de Castelló, que funciona quemando gas natural, ambas suman hasta 3’4 Gw y posiblemente sea suficiente para lo que necesitamos, pero hemos de calcularlo exhaustivamente y ello excede este artículo, queda para otro posterior. Si hiciera falta más potencia, podríamos modificar embalses como el de Tous para turbinar y utilizarlos de refuerzo o para sustituir la térmica, que emite CO₂.

En definitiva, según el informe del IVACE, podemos autoabastecernos con la electricidad fotovoltaica de las cubiertas útiles y nos sobraría mucha electricidad si aprovechamos algunos suelos degradados y mejoramos la eficiencia y el ahorro energéticos, que podemos exportar o utilizar para otras cosas. Por lo tanto no necesitamos ninguna macrocentral en la CV, como ésa que quieren hacer en Sumacàrcer arrasando 4’4 millones de m² de tierras fértiles y arboladas. Cuán significativo es que no se haya divulgado ese informe!

En realidad los únicos que necesitan las macrocentrales son los capitalistas, que han acumulado tantos millones que están viciados y tienen tanto de poder como para comprar voluntades políticas y apropiarse de la energía, concentrándola en macrocentrales inmensas y destructivas, obviamente para seguir explotándonos a todos nosotros. Así pues, hemos de oponernos a ellos y a su modelo centralizado y privatizador, al mismo tiempo que vamos instalando placas en nuestros tejados y exigimos a la administración que las instale también encima de los edificios públicos, porque son ecológicas y democratizadoras, como la luz del Sol, que es de todos y para todos los seres vivos.

Incluso son rentables porque, a los precios actuales, las placas se amortizan en 8 o 10 años con lo que ahorran del recibo eléctrico y si se consiguen las subvenciones existentes, de Ayuntamiento, Consellería e iRPF, en la mitad de tiempo, y funcionan más de 30 años… Mis placas fotovoltaicas y de calentar agua, por ejemplo, ya están más que amortizadas y ahora me suministran la energía doméstica casi gratis.

Y parece que los valencianos lo vamos entendiendo porque desde que se derogó el impuesto al sol (2018) las instalaciones solares están creciendo exponencialmente. Otra razón más para rechazar las macrocentrales, porque si empiezan a construir éstas sobrará potencia, de hecho el sistema eléctrico español ya está sobredimensionado y sobran centrales eléctricas (igual que sobran construcciones, AVE y aeropuertos, errores de los de arriba que siempre acabamos pagando los de abajo!), de forma que harán innecesarias las nuevas instalaciones de autoconsumo y entonces vendrá algún político servil, como aquel que aprobó el impuesto al sol, y las prohibirá diciendo que ya no cabe más autoconsumo en la red eléctrica…

Con un poco más de información a la ciudadanía serían muchos más los que se pondrían placas ftv sobre sus tejados y terrazas. Eliminando las trabas que ponen las grandes compañías para conectarlas en la red también aumentarían las comunidades energéticas por todas partes. Y con presupuestos suficientes para los edificios públicos la administración podría instalar autoconsumo de balance neto (energía producida igual a la consumida), ahorrando mucho dinero de todos y dando un ejemplo que fomentaría todavía más la implantación del autoconsumo entre los ciudadanos normales.

Finalmente hay que aclarar que la excusa principal para imponer las macrocentrales, solucionar la emergencia climática, viene a ser una falacia, una mentira casi, porque el sector eléctrico está descarbonizado ya en un 69% y si bien las placas fotovoltaicas ayudan un poco a frenar el calentamiento del clima, no es lo más efectivo y urgente. Los ecologistas estamos cansados de repetir que el sector que más CO₂ emite, con mucha diferencia (mirad el diagrama energético de la CV…), y por tanto el mayor responsable de la emergencia climática, es el transporte y sobre él es donde tenemos que actuar urgentemente.

Los últimos informes del IPCC calculan que tenemos que reducir a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero durante esta década para que el aumento de las temperaturas globales no sobrepasen los 1’5 °C y los fenómenos climáticos extremos no se disparen hasta niveles insoportables. Y podemos conseguirlo mejorando las ciudades, fomentando la proximidad, viajando menos, yendo a pie, en bici y tren o autobús, consumiendo productos locales, etc. etc. etc. Obviamente el coche eléctrico no es ninguna solución porque no resuelve la mayoría de problemas del actual modelo de transporte (ocupación del espacio, exceso de infraestructuras, accidentes de tráfico, …) y no hay bastantes recursos minerales para sustituir los 1.400 millones de vehículos con motor de combustión que circulan por el mundo. En el futuro la electricidad ftv sobrante podria servir para alimentar el imprescindible pero mínimo parque móvil valenciano: ambulancias, médicos, bomberos, trabajadores agrícolas, ferrocarril y poco más.

No necessitem macrocentrals!

L’any passat l’Institut Valencià de la Competitivitat Empresarial (IVACE), òrgan de la Conselleria d’Economia, va publicar l’informe titulat «Aprovechamiento Fotovoltaico en la Comunidad Valenciana», elaborat per l’Institut Tecnològic de l’Energia (ITE), i a pesar de la seua importància i de l’allau de projectes de macrocentrals fotovoltaiques (ftv), va passar pràcticament desapercebut i ignorat. L’objectiu era «identificar los municipios con mayor potencial fotovoltaico, así como seleccionar aquellos más favorables para promover el autoconsumo en su modalidad individual o bien para la constitución de comunidades energéticas locales basadas en autoconsumo colectivo».

Per a fer l’informe, els tècnics de l’ITE calcularen primer les superfícies cobertes que hi ha a la Comunitat Valenciana (CV), poble per poble, després estimaren la proporció útil per a instal·lar les plaques ftv i finalment, considerant la radiació solar que rep cada municipi, calcularen l’electricitat ftv que poden produir. En taula de la pàgina 71 sumen y calculen que la CV pot produir fins a 22.881 Gwh/any d’electricitat fotovoltaica amb les cobertes útils.

El següent pas lògic hauria sigut esbrinar el consum elèctric de cada poble o comarca i el total de la CV per a comparar i veure les possibilitats reals d’autoabastiment i prioritzar-les. No ho han fet (!?), o almenys no ho han publicat, però resulta molt fàcil, simplement hem d’anar a les estadístiques de l’IVE o les de REE i allà trobem que en 2021 la CV va consumir 27.051 Gwh/any.

És prou més que la potencial producció ftv sobre les cobertes útils, però hem de considerar que més del 18% de l’electricitat que consumim actualment prové ja de fonts renovables que no s’han de substituir, de manera que el consum brut d’electricitat a la CV és d’uns 22.182 Gwh/any, lleugerament inferior a la potencial producció ftv… O siga que les plaques solars sobre cobertes, sense cap impacte ambiental, podrien autoabastir-nos d’electricitat i encara sobrarien centenars de Gwh per a exportar. Inclús podríem tancar definitivament la perillosa central nuclear de Cofrents (no oblidem Fukushima, Txernòbil, Harrisburg, Windscale, Maiak, …), que amenaça a valencians i manxecs i vomita contínuament residus radioactius que seran perillosos durant segles.

Però som el país del sol i podem produir encara més electricitat ftv, perquè l’informe sols considera les superfícies cobertes i ací tenim altres grans superfícies d’aparcaments, estacions, autopistes, autovies, canals, embassaments i sòls molt degradats on podrien instal·lar-se milions de plaques solars sense arrancar ni un sol arbre ni formigonar la terra. Tampoc entenc massa per què no han calculat aquestes superfícies, encara que fora aproximadament, pot ser perquè haurien de recórrer físicament tota la CV o perquè encara mostraria més clarament les immenses possibilitats de l’energia solar ací. Sens dubte seran milions de m2 útils i milers de Gwh/any el que podrien aportar estes altres superfícies molt antropitzades i degradades.

Per altra banda, i més important encara, aplicant bé l’estalvi i l’eficiència podem reduir significativament el consum d’energia i estalviar recursos i diners, mantenint o inclús elevant la qualitat de vida. Millorant els processos industrials, instal·lant dobles cristalls en les finestres, posant bon aïllament als edificis, regulant suaument climatitzadors, fomentant els electrodomèstics A++, prohibint l’obsolescència programada, aprofitant la llum i temperatura naturals, etc. podem estalviar fàcilment més d’un 10% de l’electricitat que consumim, la qual cosa ens permetrà exportar més energia o instal·lar menys plaques.

Òbviament no és suficient amb les energies renovables sobre cobertes útils i alguns sòls molt degradats, ni afegint l’estalvi i l’eficiència, necessitem també bons sistemes per a emmagatzemar l’energia elèctrica sobrant de dia i disposar d’ella durant les nits, els dies ennuvolats, més curts i sense vent. Per això tenim ja la central hidràulica reversible de la Muela de Cortes, que complementa la nuclear de Cofrents, i la tèrmica de Castelló, que funciona cremant gas natural, ambdues sumen fins a 3’4 Gw i probablement siga suficient per al que necessitem, però hem de calcular-lo exhaustivament i açò excedix aquest article. Si fera falta més potència, podríem modificar embassaments com el de Tous per a turbinar i utilitzar-los de reforç o per a substituir la tèrmica, que genera CO2.

En definitiva, segons l’informe de l’IVACE, podem autoabastir-nos amb l’electricitat fotovoltaica de les cobertes útils i ens sobraria molta electricitat si aprofitem alguns sòls degradats i millorem l’eficiència i l’estalvi energètics, que podem exportar o dedicar a altres coses. Per tant no necessitem cap macrocentral a la CV, com eixa que volen fer a Sumacàrcer arrasant 4’4 milions de m2 de terres fèrtils i arbrades. Quan significatiu és que no s’haja divulgat aquest informe!

En realitat els únics que necessiten les macrocentrals són els capitalistes, que han acumulat tants milions que estan viciats i tenen tant de poder com per a comprar voluntats polítiques i apropiar-se de l’energia, concentrant-la en macrocentrals immenses i destructives, òbviament per a seguir explotant-nos a tots nosaltres. Així doncs, hem d’oposar-nos a ells i al seu model centralitzat i privatitzador, al mateix temps que anem ficant-nos plaques a les nostres teulades i exigim a l’administració que les instal·le també damunt dels edificis públics, perquè són ecològiques i democratitzadores, com la llum del Sol, que és de tots i per a tots els éssers vius.

Fins i tot són rendibles perquè, als preus actuals, les plaques s’amortitzen en 8 o 10 anys amb el que estalvien del rebut elèctric i si s’aconseguixen les subvencions existents, d’Ajuntament, Conselleria i IRPF, en la meitat de temps, i funcionen durant més de 30 anys… Les meues plaques fotovoltaiques i de calfar aigua, per exemple, ja estan més que amortitzades i ara em subministren l’energia domèstica quasi gratis.

I sembla que els valencians ho anem entenent perquè des que es va derogar l’impost al sol (2018) les instal·lacions solars estan creixent exponencialment. Una altra raó més per a rebutjar les macrocentrals, perquè si comencen a construir-ne d’aquestes sobrarà potència, de fet el sistema elèctric espanyol ja està sobredimensionat i sobren centrals elèctriques (igual com sobren construccions, AVE i aeroports, errors dels de dalt que sempre acabem pagant els de baix!), de manera que faran innecessàries les noves instal·lacions d’autoconsum i aleshores vindrà algun polític servil, com aquell que va aprovar l’impost al sol, i les prohibirà dient que ja no cap més autoconsum a la xarxa elèctrica…

Amb un poc més d’informació a la ciutadania serien molts més els que es ficarien plaques ftv sobre les seues teulades i sostres. Eliminant els entrebancs que fiquen les grans companyies per a connectar-les a la xarxa també augmentarien les comunitats energètiques pertot arreu. I amb pressupostos suficients per als edificis públics l’administració podria instal·lar autoconsum de balanç net (energia produïda igual a la consumida), estalviant-ne molts diners de tots i donant un exemple que fomentaria encara més la implantació de l’autoconsum entre els ciutadans normals.

Finalment s’ha d’aclarir que l’excusa principal per a imposar les macrocentrals, solucionar l’emergència climàtica, ve a ser una fal·làcia, una mentida quasi, perquè el sector elèctric està descarbonitzat ja en un 69% i si bé les plaques fotovoltaiques ajuden un poc a frenar el calfament del clima, no és el més efectiu i urgent. Els ecologistes estem cansats de repetir que el sector que més CO2 emet, amb molta diferència (mireu el diagrama energètic de la CV…), i per tant el major responsable de l’emergència climàtica és el transport i sobre ell és on hem d’actuar urgentment.

Els darrers informes de l’IPCC calculen que hem de reduir a la meitat les emissions de gasos d’efecte hivernacle durant esta dècada perquè l’augment de les temperatures globals no sobrepasse els 1’5ºC i els fenòmens climàtics extrems no es disparen fins a nivells insuportables. I podem aconseguir-ho millorant les ciutats, fomentant la proximitat, viatjant menys, anant a peu, en bici i tren o bus, consumint productes locals, etc. etc. etc. Òbviament, el cotxe elèctric no és cap solució perquè no resol la majoria de problemes de l’actual model de transport (ocupació de l’espai, excés d’infraestructures, accidents de trànsit, …) i no hi ha prou recursos per a substituir els 1.400 milions de vehicles amb motor de combustió que circulen pel món. En el futur, l’electricitat ftv sobrant podria servir per a alimentar l’imprescindible però mínim parc mòbil valencià: ambulàncies, metges, bombers, treballadors agrícoles, ferrocarril i poc més.

Pedro Domínguez (portaveu de La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció)

La entrada ¡No necesitamos macrocentrales! aparece primero en Ecologistas en Acción.

Read Entire Article