Qué son los nuevos Planes de Ordenación del Espacio Marítimo y en que afectan a las renovables

Cinco años después del inicio de su tramitación, el Gobierno ha aprobado los Planes de Ordenación del Espacio Marítimo (POEM), que determinan los usos del territorio marítimo español. De esta forma, se ordenan “aquellos usos que se consideran prioritarios”, con la protección de los ecosistemas como prioridad, según ha anunciado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), Teresa Ribera, en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. 

En estos planes —cuya vigencia se extenderá hasta 2027, año en el que deberá renovarse— se recopilan “las zonas que pueden tener un alto potencial para distintas actividades” adicionales a las prioritarias. Entre ellas, se encuentran las instalaciones de energía eólica marina, es decir, parques de aerogeneradores flotantes para producir electricidad.

Los POEM establecen usos prioritarios, con énfasis en la protección ambiental

Como indicó la directora general de la Costa y del Mar, Ana Oñoro, en una entrevista en elDiario.es, la utilidad de los POEM, que no existían con anterioridad, se basa en que “nos van a decir dónde se debe hacer según qué cosas y dónde no se debe”. “Hemos vivido de cara en el sentido de que [el mar] nos provee de bienes y servicios muy beneficiosos, pero creyendo que su capacidad de absorción de impactos es infinita”, destacó.

Así, la aprobación de la ordenación del mar permite “analizar y organizar las actividades humanas en las zonas marinas”, como se recoge en la nota de prensa del Miteco. En concreto, los planes de ordenación del espacio marítimo aprobados han identificado dos tipos de zonas según sus usos: de uso prioritario (ZUP), que se centran en los usos de interés general actuales e incluyen las áreas reservadas para la protección de la biodiversidad marina, así como las destinadas a Defensa y las que garantizan la seguridad en la navegación; y de alto potencial o ZAP.

Estas últimas son las que aglutinan las actividades de interés general de desarrollo futuro, como pueden ser la implantación de la energía eólica marina o la acuicultura. El objetivo es que los distintos usos puedan coexistir en las cinco demarcaciones existentes —noratlántica, sudatlántica, del Estrecho y Alborán, levantino-balear y canaria—, siempre respetando la prioridad de protección ambiental, como han incidido desde el ministerio.

19 zonas destinadas a eólica marina, un 0,46% del espacio marítimo disponible

A la espera de la aprobación de los planes de ordenación del espacio marítimo se encontraba la eólica marina. Según se precisó en su hoja de ruta, publicada en diciembre de 2021, la implementación de energías renovables en el mar “deberá desarrollarse de acuerdo con la planificación y ordenación de los espacios marinos”.

Una vez aprobados los POEM, es posible comenzar a trabajar para lograr el objetivo planteado por el Gobierno de alcanzar entre 1 y 3 gigavatios (GW) de potencia instalada de eólica marina para 2030. No obstante, será necesario seguir el mismo procedimiento que en tierra para la instalación de los parques de eólica offshore y obtener las correspondientes declaraciones de impacto ambiental.

Para instalar estos parques, los planes de ordenación delimitan 19 zonas de alto potencial distribuidas por el espacio marítimo español, las cuales se pueden visualizar en el Visor de Información Geográfica Marina del Miteco. De acuerdo con el ministerio, esto implica una ocupación en potencia de 5.000 kilómetros cuadrados (km²), es decir, el 0,46% del espacio marítimo español, que ocupa más de un millón de km².

Esto no implica necesariamente que toda esa superficie se vaya a llenar de parques eólicos marinos, sino que existe la posibilidad de instalarlos en las zonas delimitadas por los POEM. Así, los proyectos para el desarrollo de la eólica offshore tendrán que seguir el procedimiento habitual para la explotación del espacio público, en este caso, marítimo.